Estados Unidos no invitará a Cuba , Nicaragua y Venezuela a la Cumbre de las Américas de junio en Los Ángeles, afirmó este lunes el jefe de la diplomacia estadounidense para la región Brian Nichols.
“En un momento clave en nuestro hemisferio, un momento en que estamos enfrentando muchos desafíos para la democracia y los países (…) Cuba , Nicaragua y el régimen de (Nicolás) Maduro no respetan la Carta Democrática de las Américas y por lo tanto no espero su presencia”, declaró Nichols, en una entrevista a la cadena NTN24.
A la pregunta de si Washington invitará al gobierno cubano, que ha asistido a la cumbre de 2015 en Panamá, Nichols contestó: “No”. “Es una decisión del presidente (Joe Biden) pero yo creo que ha sido bien claro que (…) los países que por sus acciones no respeten la democracia no van a recibir invitaciones”, añadió.
La semana pasada, Cuba denunció que Estados Unidos la excluyó de los preparativos para la cumbre y lo calificó de “retroceso histórico” del gobierno de Biden.
Estos tres países ya figuran en la lista de los excluidos en la región para la Cumbre por la Democracia que se celebró en diciembre en Washington, junto con Bolivia, El Salvador, Honduras, Guatemala y Haití.
Las relaciones entre Estados Unidos y Cuba se han crispado todavía más desde lo que Washington califica de “ola de opresión” tras las protestas de julio de 2021 en la isla, que se saldaron con un muerto, decenas de heridos y 1.395 detenidos según el último recuento de la oenegé con sede en Miami, Cubalex.
Cuba culpa a Estados Unidos de estar detrás de estas protestas, las mayores desde el triunfo de la revolución en 1959.
Por otro lado, el gobierno de Biden no reconoce a los presidentes de Nicaragua , Daniel Ortega y Venezuela , Nicolás Maduro, por considerar que fueron elegidos en elecciones fraudulentas.
Estados Unidos y decenas de países considerando presidente interino de Venezuela a Juan Guaidó desde la reelección del mandatario socialista en 2018.
Biden ofreció pensar la inclusión de todos los países a Cumbre: AMLO
Al detallar aspectos de su conversación telefónica con el mandatario estadunidense Joe Biden, el presidente Andrés Manuel López Obrador subrayó dos planteamientos centrales: agilizar la inversión para el desarrollo en Centroamérica para enfrentar el problema migratorio y la petición formal de que la convocatoria a la Cumbre de las Américas no excluya a ningún país de la región.
“¿Cómo es que convocamos a una Cumbre de las Américas pero no invitamos a todos? ¿De dónde son los que no están invitados?, ¿De qué continente, de qué galaxia, de qué satélite?”
En su caso, subrayó, se trata de un encuentro para dialogar, para que los países se entiendan, por eso no puede ser excluyente, para evitar la confrontación.
López Obrador dijo que Biden ofreció pensar la propuesta de incluir en la cumbre a todos los países de la región, más allá de que algunos determinen no acudir.
En su conferencia matutina, el mandatario condenó el bloqueo económico de Estados Unidos contra Cuba: “Imagínense el caso de Cuba en comparación con México. Nuestros hermanos migrantes nos ayudan enviando más de 50 mil millones de dólares al año. Esto no tiene que ver con ideologías ni con partidos, es ayuda a los familiares. ¿Por qué negarles esa posibilidad a los cubanos que tienen sus familias en Cuba? ¿Por qué asfixiar?”.
Tras señalar que hay grupos políticos de interés que han sacado “raja” económica y política de presionar para mantener este bloqueo a la isla, estimó que no van a lograr su propósito de levantar al pueblo cubano contra su gobierno.
Pero, dijo, como dicen los abogados, suponiendo sin conceder, “que echaran el pueblo de Cuba encima o en contra de su gobierno, que no lo veo factible por la dignidad de ese pueblo, que ha resistido 60 años. Pero aceptando sin conceder que con esa estrategia se rebelara el pueblo contra sus autoridades, sería un acto ruin. Es como ganar una batalla pírrica, inmoral”.
En lo concerniente a la migración, comentó que hay coincidencia en la necesidad de mayores inversiones en Centroamérica, pero mencionó que los tiempos son fundamentales. Recordó que desde la administración de Donald Trump se habló de una inversión de cuatro mil millones de dólares, pero a la fecha solamente se han canalizado 100 millones de dólares.
Destacó que se abordó la posibilidad de incrementar las visas temporales de trabajo, porque es una realidad que en Estados Unidos falta fuerza de trabajo. Lo más conveniente y lógico es ordenar el flujo migratorio y dar oportunidad a quienes quieren trabajar en Estados Unidos.
Por otra parte, dijo que era imperioso canalizar los recursos a Centroamérica porque se habla de promoción de inversiones privadas, pero es necesario que se convierta en realidad y ya tener certeza de los tiempos, porque la gente atraviesa por una situación difícil en lo económico, en lo social.
“Lo otro es que confían en las llamadas organizaciones no gubernamentales y los recursos, que no son muchos, los bajan por estas organizaciones y no todas, pero una buena cantidad se gastan todos esos recursos en aparatos burocráticos, en asesoría, en estudios y nos les llega nada a los campesinos, a los jóvenes, a la gente. Lo que estamos proponiendo es levantar un censo de jóvenes que quieran trabajar como aprendices en Guatemala, Honduras, El Salvador”.
Celac y Grupo de Puebla demandan una Cumbre de las Américas sin exclusiones
El Grupo de Puebla y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) llamaron este lunes a celebrar una Cumbre de las Américas sin excluir a ninguna nación, en un mensaje claro a sus organizadores.
“El Grupo de Puebla invita al Gobierno del Presidente (de Estados Unidos, Joe) Biden a realizar la próxima Cumbre de las Américas en los Ángeles, en el mes de junio, sin excluir a los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua”, afirmó la agrupación política en un comunicado.
Según este foro de líderes políticos de izquierda, dejar por fuera a estos países que han sufrido “los costos sociales del impacto depredador del virus del COVID-19” no tienen ningún sentido, si a fin de cuentas se analizará como tema central de la Cumbre el manejo de la pandemia y el cambio climático en la región.
“Todos los países latinoamericanos requieren de la cooperación internacional y el intercambio económico para poder soportar la factura social y atender la reactivación económica derivada de la pandemia. Algunos de ellos como Cuba podrían inclusive aportar mucho en nuevas experiencias para la prevención y erradicación del virus y sus posibles nuevas variaciones”, indicó.
De igual forma, resaltó que esta sería una discriminación por razones ideológica que afectaría las posibilidades de cooperación regional necesaria para superar las crisis venideras.
Por su parte, la Celac insistió en que “es indispensable que superemos las divisiones ideológicas y nos enfoquemos en la búsqueda de coincidencias”, debido a las graves consecuencias que la pandemia del coronavirus ha dejado en la región.
Este organismo multilateral reivindica el diálogo y la cooperación como herramientas claves para el bienestar de los pueblos. Por eso, considera que esta Cumbre de las Américas “representa una gran oportunidad para construir un espacio de encuentro en el que participen todos los países del hemisferio de modo abierto e inclusivo, bajo el objetivo unificador de concertar acciones conjuntas”.
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, especialmente Argentina, nación que ostenta la presidencia pro témpore de esta entidad intergubernamental, instó a los organizadores “a evitar exclusiones que impidan que todas las voces del hemisferio dialoguen y sean escuchadas”.