Marita Corzo notificó a Daniel Quiroga sobre la presentación judicial, en la esfera federal, sobre su destitución al frente de la OSUNLaR. La Vicerrectora hace “responsable” al rector por la “usurpación de funciones” en la obra social y exige “la nulidad de la sesión” en la cual fue desplazada del cargo.
María del Carmen Corzo ratificó su “denuncia de nulidad absoluta de sesión ordinaria del 25 de abril de 2023 del Consejo Directivo” de la Obra Social de la Universidad Nacional de La Rioja e intimó Daniel Quiroga para que “cese de usurpación de funciones”, al adjudicarle “responsabilidad solidaria” de su destitución como presidenta de la OSUNLaR.
En la notificación por la cual advierte la formulación de “reserva federal” del caso, la Vicerrectora se manifiesta como “única presidente legítimamente en funciones” de la obra social; y, en dirección al Rector, exhorta: “respetar la autonomía e independencia de nuestra obra social, especialmente respetando mi rol como presidente, absteniéndose de permitir que personas sin legitimación se atribuyen el carácter de Presidente Suplente que no tienen y/o que en una sesión sin las mayorías legales se haga lugar a una moción calumniosa y elaborada por la conducta temeraria de la sra. Síndico (Liliana Ortiz Fonzalida) y la sra. (Ana Laura) Toro, sin prueba alguna”.
Seguidamente, exige que se “declare la nulidad de la sesión del 28 de abril de 2023 del Consejo Directivo de OSUNLaR, se retome el orden del día previsto y se formule nuevamente la supuesta moción e imputación conforme las normas vigentes, no sólo a nivel institucional sino de carácter constitucional y convencional”.
Por último, Corzo reafirma: “expreso mi más profunda tristeza por los hechos que se han desarrollado, pero no claudicaré al ejercicio de las responsabilidades que me han sido atribuidas, ni permitiré el atropello a mi persona ni a la Obra Social que se pretende ejecutar arteramente”.