La llegada del diputado y ex ministro de Defensa a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) en el lugar de Cristina Caamaño. había sido anunciada el sábado por Alberto Fernández.
El presidente Alberto Fernández prorrogó este lunes por cuatro meses la intervención de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y para llevar a cabo esa tarea oficializó la designación de Agustín Rossi, un dirigente que durante los últimos meses intensificó su sintonía con el primer mandatario y que en Casa Rosada es visto con potencial para convertirse en un nuevo interlocutor político del oficialismo.
El sábado pasado, el Jefe de Estado había anunciado a Rossi como reemplazante de Cristina Caamaño para desempeñarse al frente de la AFI durante los próximos 120 días, aunque fuentes de la Presidencia confirmaron que la intención es “concluir” la normalización del organismo y nombrar al exlegislador como Director.
“Corresponde disponer una prórroga de la intervención del organismo por un plazo de 120 días y proponer la designación de un nuevo Interventor de la Agencia Federal de Inteligencia, con el objetivo de finalizar estas tareas y lograr la efectiva normalización de este organismo. Para ese fin, se enviará el correspondiente pliego para su aprobación por el Senado de la Nación”, dijo el decreto presidencial que lleva el número 295/22.
Se destacó además que Caamaño “llevó adelante su tarea con compromiso y honestidad estableciendo los cimientos para que el Estado democrático cuente con mayor cantidad y calidad de información útil para la toma de decisiones, siempre en el marco del cumplimiento de la normativa vigente, dejando atrás prácticas antidemocráticas que constituyeron durante años los sótanos de la democracia”.
Y subrayó el decreto que “en la actualidad, la meta principal respecto de la Agencia Federal de Inteligencia es su completa normalización”.
Sobre el trabajo a realizar en la exSIDE, Rossi dejó en claro que su “objetivo” es “seguir profundizando” la “línea de trabajo” desarrollada por Caamaño.
Fernández, a menos de 10 días de asumir la Presidencia de la Nación, había intervenido el organismo en función de las “relevantes disfuncionalidades” producidas durante el macrismo y llegó a referirse a esa institución, tal como se dice en el decreto, como “los sótanos de la democracia”.
Pero, más allá, del rol institucional que desempeñará desde este martes, Rossi es visto en Casa Rosada como “una nueva voz” para hacer escuchar las posiciones del Gobierno nacional.
Ese es un rol que el exministro de Defensa ya venía realizando desde hace algunos meses dado su buen diálogo con el Presidente.
De hecho, el nombre del dirigente santafesino venía sonando desde hace varios meses como una “ficha puesta” para volver a un Gabinete nacional que había dejado para participar en las elecciones PASO de 2021.
Cada vez que se hablaba de cambios en el equipo del Presidente, se hacía mención a Rossi: “El Chivo es un compañero que queremos todos, pero hoy no hay lugar”, decían en Balcarce 50 ante cada rumor.
El vencimiento del plazo de intervención de la AFI brindó la oportunidad para que el santafesino consiga ese lugar.
“No es habitual la situación de alguien que se va del gabinete y regresa al mismo gabinete. En general, cuando uno se va espera a otro Gobierno para participar”, dijo el flamante funcionario en declaraciones a la prensa.
El exjefe de la bancada kirchnerista en la Cámara de Diputados ocuparía, entonces, un rol no formal que ya supo realizar en otras épocas: convertirse en una voz más del diálogo con los medios para comentar la actualidad nacional y la de la coalición gobernante.
En esa función se complementará con otros dirigentes de alto perfil mediático, entre ellos la portavoz Gabriela Cerruti, y el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, un grupo al que se sumaría -según estiman en Casa de Gobierno- Daniel Scioli, elegido para reemplazar a Matías Kulfas en el Ministerio de Desarrollo Productivo.
Este lunes, por ejemplo, Rossi brindó notas en las que afirmó que se abre una “nueva etapa” en el Frente de Todos (FdT) a partir de que hay una “desescalada de tensiones” entre el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
“La fotografía del viernes trajo un soplo de aire fresco al interior de nuestro espacio. Estuve el sábado con el Presidente y con Cristina Caamaño, se lo veía contento, muy conforme con lo que había su sucedido el día viernes”, sostuvo en declaraciones para Radio con Vos y El Destape Radio, en referencia al acto que el mandatario y la vicepresidenta compartieron ese día en Tecnópolis.
Para él, los cambios internos dentro del FdT no quieren decir que las diferencias se terminaron pero sí que “están en un canal mucho más dialogado”, al contrario de lo que ocurre, dijo, “dentro de Juntos por el Cambio”.