Por Carlos Vega. Periodista
Ganar, no hay otra. El próximo sábado, a las 16.00 (hora de Argentina), debería imponerse a México; sino se terminaría la ilusión del equipo «albiceleste» en el Mundial de Qatar.
Quizás (y acá entramos con hipótesis y matemáticas) un empate mantendría una mínima esperanza, pero sumaría un punto y México totalizaría 2; y en este marco, Polonia y Arabia Saudita deberían empatar, porque si hay triunfo de algunos de ellos, se diluirían las chances y todo quedaría entre Arabia Saudita, Polonia y México.
Por eso, es imprescindible ganar, y sólo ganar. Los eventuales tres puntos para Argentina ante México, pondrían a la «Scaloneta» en una expectante posición porque comenzaría a depender de sí misma, independientemente de lo que suceda entre africanos y europeos (triunfo de cualquiera o empate). Así, Messi y compañía lograrían 3 puntos. Los «Aztecas» quedarían en uno y los «Árabes» llegarían a 6 si gana, 4 puntos en caso de empatar o quedarían en 3 si pierden; en tanto que los europeos sumarían 4 con una virtual victoria, 2 si llegaran a empatar o se mantendrían en un punto si pierden.
En esta situación, Argentina debería ganar los dos partidos que siguen para asegurar su clasificación; porque con potenciales 6 puntos pasaría a México y a Polonia, independientemente de los resultados que consigan ambos equipos ante Arabia Saudita.
Está clarísimo que el empate entre polacos y mexicanos fue un soplo de vida para los de Scaloni.
También está clarísimo que hay jugadores como Di María, Paredes y Romero -quienes hace más de un mes que no juegan y volvieron a hacerlo ante los asiáticos-, no están al 100% para jugar; tienen el alta médica, pero les falta rodaje de juego y esto fue determinante en el funcionamiento del equipo.
El pánico escénico de De Paul, Gómez y Álvarez se podría entender por ser el debut; pero «ya probaron», y ahora deberán salir a mostrar su calidad futbolística; sino, al banco.
Argentina mantiene la identidad, aunque debe recuperar confianza, la cual se reforzará entre cada uno de los jugadores y consolidará dentro de la cancha, para volver a tener el protagonismo en la Copa de Mundo.