Europeos y africanos se instalaron en la semifinal de la Copa de Mundo, y se medirán el miércoles 14, a las 16.00, por un lugar en la final. Francia busca llegar al último juego y lograr el título por segunda vez consecutiva, mientras que Marruecos jugará por avanzar y seguir soñando, en su primera semifinal en su historia mundialista.
Es importante destacar que en las historias sorpresivas que nos viene otorgando el Mundial de Qatar, en cuartos de final, nos regaló a Marruecos. El equipo dirigido desde hace tres meses (lo agarró el 31 agosto) por Walid Regragui, viene consolidando un juego eficaz desde fase de grupos a cuartos de final, que le dio efectividad en cancha y hoy lo tiene entre los cuatros mejores equipos de la Copa del Mundo.
Causalidad, en base a triunfos, que en primera instancia, lo convirtieron en revelación, y hoy, lo justifican como una realidad del Mundial, clasificando por primera vez a un equipo africano a semifinales de una Copa del Mundo.
En el partido ante Portugal, no salió a esperar. Jugó, y muy temprano, En-Nesyri saltó más alto que los defensores y arquero de Portugal, para anotar el gol que, a la postre, le dio el pase a semifinales.
Marruecos aguantó todo el segundo tiempo y contó con tres situaciones claras para aumentar y no pudo, falló por ineficacia e inexperiencia, porque sus delanteros apostaron a definir con clase, en vez de asegurar el resultado.
Pasó Marruecos, sigue en busca de su sueño de estar en la final, y también ganarlo, aunque deberá ir paso a paso, porque de esta manera llegó a semifinales.
«La France» avanza
La Selección de Francia, volvió a mostrar que es candidata a llegar a la final y volver a ganarlo. El equipo de Didier Deschamps derrotó a Inglaterra con goles de Tchouaméni y Giroud, y con su juego fundamentó porque está entre los 4 mejores de este mundial.
Hay que tener presente, que Francia es el actual Campeón del Mundo.
En el partido, los azules no fueron más que los ingleses, aunque ratificó su supremacía en el resultado, porque se adelantó en marcar a través de Tchouaméni. A partir de ahí pudo equilibrar el trámite del juego en el primer tiempo, pero no le fue del todo bien en el complemento.
Los ingleses fueron al ataque. Harry Kane hizo el gol del empate mediante un penal, y justificó el manejo inglés. Sin embargo, Francia ajustó la marca en mitad de cancha, y con un trabajo cooperativo de todas sus líneas, ganó la pelota, y ahí aprovechó para que Olivier Giroud, marque el gol del triunfo.
Los británicos no se quedaron, retomaron parte del control y las mejores situaciones de gol. Kane volvió a tener un penal, y lo tiró por arriba, y ahí, comenzó a diluirse la ilusión inglesa.
Francia manejó algunas situaciones, aguantó otro tanto, y no cerró el partido, sino su pase a semifinales, en busca de la segunda final consecutiva.