Agustín Tapia y Arturo Coello, junto a Gemma Triay con Alejandra Salazar, se consagraron el La Rioja Pádel Open, en la segunda fecha del World Padel Tour que se disputó en el Superdomo.
El riojano-catamarqueño Agustín Tapia vivió uno de los mejores momentos de su carrera. Más allá de haber ganado la primera fecha en Dubai, repitió en Argentina, especialmente en La Rioja, muy cerca de su tierra, aunque con raíces riojanas por parte de su mamá y de su abuelo «Tito», con quien aprendió a jugar pádel.
La pareja argentina-española Agustín Tapia y Arturo Coello se lució en la final ante los argentinos Leandro Augsburger – Valentino Libaak, con un inapelable 6-1 / 6-0.
Tapia y Coello marcaron la supremacía y dominio absoluto del juego. Contrarrestaron los intentos de saque y volea que propusieron los rivales con devoluciones largas y globos, obligándolos a retroceder, no ganar la red y quitarle potencia al smash de Augsburger y Libaak, generándoles errores no forzados y apresuramiento en definir cada punto.
A esto hay que sumarle el gran nivel de juego y excelente partido que hicieron Tapia y Coello. Diagramaron el encuentro a su medida y en todo momento fueron superiores, sumando calidad, experiencia y contundencia en la definición de cada punto, para cerrar el partido final en 42′ y consagrarse campeones del World Padel Tour en La Rioja.
Juego y Experiencia
La final femenina se disputó entre españolas. El título fue para las experimentadas Alejandra Salzar – Gemma Triay sobre las jóvenes Beatríz González – Marta Ortega por 6-7 / 6-4 / 6-1.
No fue fácil el partido para las 2 parejas. Fue de ida y vuelta todo el tiempo y se definió en más de 2 horas de juego en tres sets. Además, este cruce tuvo significancia porque fue la primera final femenina del World Padel Tour en el continente americano, ya que es la primera vez que salió del continente europeo. Otro de los datos importantes que dejó esta final es que marcó la 50° consagración de Alejandra Salazar en su actividad profesional en el WPT.
Sin embargo, Triay y Salazar tuvieron que amoldarse a un partido equilibrado, con errores compartidos, aunque con más precisión, tranquilidad y efectividad para marcar y generar diferencias. Ortega y González pudieron cerrar el juego a su favor, pero en el trámite general, fueron menos y eso lo sintieron en el segundo y tercer set.
Triay y Salazar basaron el triunfo en disputar cada punto. No se desesperaron, estiraron la definición en cada punto y en muchos momentos obligaron que las rivales definieran, y lo hicieran mal.
Fue clave porque ganaron confianza, quebraron el servicio y esa diferencia sirvió para ganar el segundo set. En el tercero aplicaron la misma metodología y se mostraron superiores porque atacaron y redujeron espacios a las rivales. Así ratificaron su juego y aseguraron el título en La Rioja Pádel Open en el World Padel Tour.
