Una vez que pase cronológicamente el Mundial de Fútbol de Qatar, sea el resultado que sea para la afición argentina, inmediatamente tomará impulso la carrera electoral. Los equipos (políticos) ya muestran algunas de sus figuras y van completando su plantel. ¿Cuáles serán las figuritas más difíciles, las que se cambiarán o desecharán?
De cara al año electoral que se avecina, la dirigencia local va tomando posicionamiento, no solo de acuerdo a las fluctuaciones políticas en sus espacios de pertenencia, sino también -o principalmente- según vayan tomando fuerza las y los referentes nacionales.
Otro de los factores que hará de temporizador de definiciones será la fecha de las elecciones: si los comicios provinciales son junto a los nacionales, o no. ¿Por qué este elemento puede ser determinante para las eventuales candidaturas locales? Porque el efecto arrastre (o sobrepeso) de la figura nacional puede ser decisivo en las urnas riojanas.
Al respecto, el Gobierno provincial aun no resolvió en qué fecha de 2023 se votarán los estamentos locales: si junto al calendario nacional (sería en octubre) o si adelanta los tiempos (¿mayo?).
Esto quedaría develado inmediatamente concluya el mundial de fútbol en Qatar.
Los equipos que van presentando los espacios
Mientras se esperan precisiones sobre las fechas electorales, las y los aspirantes a los distintos cargos que se pondrán en juego ya se muestran con sus referentes nacionales.
El oficialismo provincial tiene resuelto quién buscará la gobernación -será el propio Ricardo Quintela, quien irá por su reelección-. Además, se entiende que será adhiriendo a la gestión nacional.
Más allá de que el justicialismo local parece tener disipado todo titubeo en estos aspectos, aún se mantiene en discusión si la fecha de elecciones locales será la misma que las nacionales, o no. Las especulaciones están en si sumará o restará plegarse al candidato o candidata nacional y en cómo repercutiría en el humor del gobierno nacional la eventual decisión de desdoblar los comicios. A la par, se presenta la incógnita sobre quién acompañará a Quintela en la fórmula, entendiendo que -de ser electo- sería su último período como gobernador y quien lo secunde quedaría en un lugar expectante de relevarlo a partir de 2027.
Entre definiciones y discusiones, el peronismo riojano espera saber quién sucedería a Alberto Fernández. Lo planteamos en términos de ‘sucesión’ porque, más allá de que el propio Presidente deslizó la posibilidad de buscar su reelección, tiempo atrás, el desgaste de su gestión, principalmente a causa de la falta de contención del proceso inflacionario, parece atentar contra sus posibilidades de continuidad por cuatro años más. 
Tampoco es seguro que Cristina Fernández pretenda buscar su tercera presidencia; particularmente teniendo en cuenta sus declaraciones en la reaparición pública que hiciera tras el atentado sufrido: «La máxima ambición que tiene un político en la Argentina, que es ser Presidente, yo ya la tuve por partida doble (….). No son esas las cosas que me seducen y animan», dijo la Vicepresidenta el pasado 15 de septiembre. El tercer nombre que busca ponerse el traje de precandidato es el actual ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, aunque también está sujeto a si logra instrumentar medidas que redunden directamente en beneficio del bolsillo de las y los argentinos. Si ninguna de estas alternativas del Frente de Todos llega al 2023 con una imagen electoral consolidada, el FdT -de continuar como tal- deberá evaluar otros nombres: ¿”Wado” de Pedro?, ¿algún gobernador o gobernadora justicialista? Veremos.
Por otra parte, la oposición provincial no tiene cerradas las candidaturas para los principales cargos locales que se pondrán en juego, ni tampoco hay certezas si lograrán reflotar la coalición que en 2019 alcanzó a ocupar el Palacio Ramírez de Velasco y numerosas bancas en los concejos deliberantes (en especial en Capital), legislatura provincial y Congreso de la Nación.
Sabe la oposición que para hacer frente a la estructura del oficialismo deberá reensamblarse. Por lo pronto, varias voces se mostraron como la alternativa al justicialismo local.
Uno de los primeros en ponerse en carrera rumbo a la Casa de las Tejas es el actual diputado nacional Felipe Álvarez, quien llegó a la Cámara Baja en la coalición de Juntos por el Cambio, pero inmediatamente conformó el bloque SER (Somos Energía para Renovar). De origen justicialista, Álvarez se muestra como el referente local del “larretismo”, junto al ex diputado nacional Julio Sahad. El mismísimo Horacio Rodríguez Larreta, en estos últimos días, los ‘bendijo’ como tales. Aquí, el primer cruce partidario manifiesto. En su resurgimiento en la escena política, Sahad -presidente del PRO local- negó explícitamente remitirse a la presidenta del PRO nacional, Patricia Bullrich.
Esta situación lejos está de dejar sin referencia local a la ex funcionaria macrista y delaruista. La Unión Cívica Radical riojana -otrora socia política de Álvarez y Sahad- se muestra expectante por el posicionamiento de Bullrich como precandidata a presidenta, y promueve su llegada a La Rioja para la próxima semana. De la misma manera, la UCR riojana también va tanteando la recepción del electorado en otro de los representantes del espacio que expresó sus aspiraciones presidenciales: el gobernador jujeño Gerardo Morales. Cuál es la diferencia entre ambos; la cercanía de una y el alejamiento del otro de la figura de Mauricio Macri. Igualmente, el ex presidente confesó sus deseos de volver al máximo cargo administrativo del país; aunque aún no logra el respaldo suficiente. La militancia nacional y local sabe de lo difícil que sería el tener que revertir la imagen dejada en su paso por Casa Rosada.
Como no hay dos sin tres, el radicalismo riojano va evaluando además los movimientos del diputado nacional Facundo Manes, y su “Empatía” con el potencial electorado.
Para los cargos locales, la oposición apuesta a la fuerza de tracción de quien finalmente se convierta en la o el candidato a nivel nacional, lo que generará un fuerte envión en tierras provinciales, en el caso en que los comicios no se desdoblen. Mientras tanto, ya se lanzó el viceintendente capitalino, Guillermo Galván, en la disputa por la gobernación. También están en gateras quienes ocupan cargos y trayectoria de referencia política como los casos de la intendenta capitalina Inés Brizuela y Doria -que, por hoy, iría por la reelección municipal- y el senador nacional Julio Martínez -con menos impulso por sus reiterados y fallidos intentos previos por lograr ser gobernador-.
Otra de las figuras políticas locales que se proyecta firmemente hacia el año electoral es el diputado provincial Martín Menem. Al igual que los casos anteriores, sus perspectivas están puestas en el efecto arrastre del estamento nacional, a partir del repentino crecimiento del libertario Javier Milei; algo que el joven legislador ya comprobó en su incipiente carrera política, tras arribar a la Legislatura provincial en apenas pocas semanas de campaña en 2021.
Por último, los sectores identificados con la izquierda -cada vez más fragmentados-, sin la estructura suficiente como para mantenerse en la atención pública con tanta permanencia como los espacios antes mencionados, sostienen una acción política que, sin dudas, acentuarán a medida que entremos en el año electoral.
En esta línea, el Frente Riojano de Organización Popular tuvo sus primeros pronunciamientos de proyección a 2023, en estos últimos días, aprovechando el Primer Congreso del FROP-PreCongreso Nacional de Unidad Popular. Junto al dirigente nacional de UP y coordinador del Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas, Claudio Lozano, el espacio referenciado en el ámbito local con el cooperativista Fernando Gómez, se manifestó distante a las actuales políticas del Gobierno nacional (a pesar de haber formado para de dicha gestión, hasta tiempo atrás), aunque mantienen su apego a CFK.
Son tiempos premundialistas. La efervescencia futbolística va subiendo al punto en que el cierre de año (ojalá sea hasta el día del partido final del certamen: el 18 de diciembre) la atención estará centrada en Medio Oriente. Hasta entonces, el álbum electoral 2023 se irá completando, en principio, de acuerdo a las estimaciones aquí planteadas. Posteriormente al fervor mundialista, en el escenario político, ¿Habrá cambio de figuritas? ¿crecerán las ilusiones de alguno de los planteles o se devaluará algún otro? ¿Cómo se completará el álbum ‘Elecciones 2023’?
Empezó a rodar la pelota…
