La causa pasó al Juzgado de Violencia de Género. El abogado querellante exige que se califique la causa como homicidio culposo agravado y que se verifiquen otros hechos delictivos como desobediencia a la autoridad y lesiones a un policía que actuó al momento del siniestro vial del pasado 18 de junio. Esta mañana, despidieron los restos de la joven.
En la mañana de este martes, familiares, allegados, amistades y la comunidad escolar donde asistía, despidieron a Trinidad Ruarte, la menor que había sufrido lesiones graves tras ser atropellada en Ruta 38 el pasado 18 de junio.
Paralelamente, la justicia local dio lugar al pedido del abogado querellante, Sergio Gómez, para que la causa pase a la órbita del Jugado de Violencia de Género y Protección Integral del Menor, ya que la joven tenía 17 años. De esta manera, el caso quedó a cargo de la jueza Gisela Flamini.
Además, el patrocinante de la familia de Trinidad Ruarte solicitó el cambio de calificación penal, al tratarse de un homicidio culposo agravado debe verificarse otros hechos delictivos como desobediencia a la autoridad y lesiones a un policía que actuó al momento del siniestro vial.
Sergio Gómez, abogado patrocinante de la familia de Trinidad Ruarte
“Cuando hablamos de homicidios culposos, son delitos excarcelables”, por lo que no debe sorprender “que, en determinado tiempo, (Federico) Luna esté por la calle”, agregó Gómez en referencia al responsable del luctuoso hecho.
Trinidad Ruarte falleció en la noche de este lunes, alrededor de las 21.20, tras ser desconectada de la asistencia mecánica. La joven se encontraba con muerte cerebral, estado irreversible al que llegó en la madrugada de dicha jornada.
La menor había sufrido lesiones graves tras ser atropellada en Ruta 38 el pasado 18 de junio, en horas de la madrugada. Sucedió cuando Trinidad, junto a una amiga, intentaban cruzar la ruta y fueron embestidas por un vehículo en el cual se conducía el médico cirujano Federico Luna.