
Durante los mandatos de Lula, de 2003 a 2010, millones de personas se incorporaron a la clase media gracias a los elogiados programas sociales del exmandatario, que llegó a la Presidencia tras haber nacido en la pobreza, en el nordeste de Brasil.
Brasil ha comenzado a crecer otra vez desde el año pasado, cuando su economía repuntó más de 4,5% en 2021, la mayor subida en una década, luego de un retroceso de 3,9% en 2020, el primer año del coronavirus, el mayor desplome en 24 años.
Este año, la economía brasileña acumula un crecimiento de 2,5%, gracias a un avance en todos sus sectores: la industria, los servicios y la actividad agropecuaria, según cifras oficiales.

Sin embargo, la inflación se ha disparado hasta un 8,8% como consecuencia de la guerra en Ucrania, una cifra muy elevada para un país acostumbrado a entre 3 y 4% anual, y que ha empujado a millones más a la pobreza.
Lula es favorito entre el electorado más pobre y entre las minorías, incluyendo a las mujeres, mientras que la base electoral más sólida de Bolsonaro está formada por los blancos y los sectores evangelistas, muy importantes en Brasil.

Bolsonaro insistió la noche de este sábado con que debería ser reelecto al menos con el 60% de los votos, pese a que los más recientes sondeos volvieron a mostrar a Lula no solo arriba, como toda la campaña, sino con el 50% de los votos más uno necesario para evitar el balotaje.

La justicia electoral prohibió ingresar a las cabinas de votación donde se encuentran las urnas electrónicas con teléfonos celulares para evitar divulgación de fake news sobre posibles fraudes como los advertidos por Bolsonaro, sin pruebas, durante la campaña.
En cadena nacional en la noche del sábado, el presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil, Alexandre de Moraes, aseguró que está garantizada la libertad y la seguridad para los votantes.
Según recalcó, el sistema de urnas electrónicas utilizado por Brasil, tan criticado por Bolsonaro, permite la divulgación de los resultados el mismo día, «con agilidad, seguridad, competencia y transparencia gracias a tecnología avanzada, confiable, segura y auditable».