De La Rioja a Israel: buscando un futuro a pesar de la guerra

pendulo
El Pendulo
Periodista

Por María Vázquez

Mientras miles de argentinos y argentinas solicitan ser evacuados de Israel, una familia riojana se radicó en el país de Medio Oriente. Moisés Jabif habló con El Péndulo y comentó cómo se vive a tan sólo 40 kilómetros de Gaza, la decisión de radicarse allí y las expectativas a futuro.

Con 31 años, Moisés quien es descendente de judíos, junto a su esposa Natali Villanueva y su beba Janel -de 6 meses-, partieron hace un poco más de dos semanas a Israel con el objetivo de cumplir con nuevos desafíos y concretar sus sueños tan anhelados.

La iniciativa de irse a vivir a Israel surgió cuando en el 2016 tuvo la oportunidad de viajar con Taglit Birthright Israel, que es una organización que emprende viajes a Israel para jóvenes judíos. Es así que durante 10 días conoció el país asiático en su totalidad.

“Fue uno de los viajes más importes de mi vida, fue lo que me marcó un antes y un después de lo que yo quería para mi vida. Fue un viaje clave, el que me despertó el gran sueño de vivir en Israel”, comenta el joven en diálogo con El Péndulo.

Al ser consultado por qué eligió Israel y no otro país -como España, por ejemplo, donde cuenta con familiares-, Moisés comenta que, en este caso, es “muy difícil si uno no tiene la ciudadanía”. “Sería muy difícil quedarse en España porque no estaría de forma legal, sólo podría estar por tres meses y creo que no es saludable para la cabeza y no sería lo correcto”, agrega.

Al proceso de emigrar a Israel se le conoce como hacer “Aliá”, que en español significa “ascender”; es así que cuando uno retorna allí, generalmente tiene la posibilidad de volver con todo el paquete completo que es vivienda durante 6 meses, un sueldo que alcanza para la alimentación y todo lo demás; y el intensivo en el “ulpán”, que es el marco de estudio de hebreo, o sea que te enseñan el idioma durante 6 meses. “Luego de ese tiempo ya debo buscar mi trabajo, irme a vivir a un departamento, ya me tengo que manejar por mis propios medios”, relata Moisés.

“Nosotros vivimos en Ashdod, que es un lugar hermoso, es muy moderno, hay muchos edificios altos, playas hermosas, súper limpias y arenas blancas. Estoy cegado con el lugar. Además, tenemos todos los servicios esenciales (luz, agua); es un edificio donde viven también otras personas que hicieron Aliá y en el lugar no nos falta nada; tenemos mesa, sillas, colchón, frazadas, vajilla… tenemos todo, básicamente todo. Como si ayer hubieran vivido otras personas. Literalmente, nos estaban esperando para vivir ahí”, continúa.

La vida en Israel

Para Jabif, entre los servicios que mejor funcionan en Israel están el internet y las comunicaciones, aunque con el idioma sería “lo único complicado hasta el momento ya que en La Rioja no había posibilidades de poder aprender, salvo que de forma online”, explica; y agrega: “yo hice un ulpán allá (por La Rioja), pero no es lo mismo que hacerlo desde aquí (Israel), de forma presencial, así que de a poco voy remándola, acostumbrándonos y poniendo en práctica todo lo que aprendemos de forma diaria”, añade.

Asimismo, en referencia a la condición actual de su pareja, Natali, Moisés dice: “está como yo, está muy feliz, muy contestos. Fue un cambio durísimo, siempre tuvimos la idea de irnos a vivir a otro país, pero de pensarlo a hacerlo hay un súper larguísimo trecho con muchas emociones y muchos sentimientos. Nosotros nos lloramos casi todo el viaje, pero bueno, todo sacrificio va a tener su recompensa”, confía.

“Me siento más seguro aquí que en Argentina”

Ante la continuidad de la guerra y un posible ataque a la ciudad donde residen, Moisés afirma tener un “plan B”, en caso que deban dejar el país: “nosotros tenemos un capital por si debemos volvernos o irnos de Ashdod”. “Igual, el país está súper preparado para cuidarte. Si bien, casi siempre hubo tensión de misiles y esas cosas, yo me siento más seguro aquí que en Argentina. Vos podés caminar en la calle y nadie te va a venir a robar el bolso o intentar matarte por un par de zapatillas, como en otros países; eso no pasa aquí”, detalla.

Si bien, Ashdod es una ciudad a unos 40 kilómetros de Gaza, Moisés es optimista frente al conflicto de Oriente Medio y expresa: “creo que, de momento, y el hecho de empezar a entregar rehenes y hacer ese tipo de negociaciones, quiere decir que ya está habiendo una pequeña tregua. Hay que tener en cuenta que, las guerras, nunca se sabe cómo terminan, sólo sabemos el inicio y nunca sabemos el final. Tratar con terroristas es muy difícil de entender”.

“Desde que nosotros llegamos, sólo sentimos una sola alarma donde debíamos ir al refugio en 45 segundos, y ya llevamos dos semanas y solamente la escuchamos una sola vez”, revela Moisés.

Finalmente, reitera: “estamos muy contentos, muy felices, a pesar de haber sido un gran cambio para nosotros, estamos muy dispuestos a dar de todo para empezar a progresar en este país”.